Malditos, adjetivo otorgado a ciertos poetas por haber llevado una vida de excesos, pensamientos bohemios y, en lo particular, una visión del mal en cada una de sus obras; un velo casi invisible que cubría cada uno de sus trabajos.
Este grupo de «malditos» fue honrado por el poeta francés Paul Verlaine, quien a su vez se consideraba uno de ellos, en su obra titulada «Los poetas malditos», una serie de ensayos publicados por vez primera en 1884 y en los cuales mencionaba a los siguientes personajes como parte de este conjunto:
Marceline Desbordes-Valmore (Francia, 1786-1859)
Auguste Villers de L’Isle-Adam (Francia, 1838-1889)
Stéphane Mallarmé (Francia, 1842-1898)
Tristan Corbiére (Francia, 1845-1875)
Arthur Rimbaud (Francia, 1854-1891)
Pauvre Lelian, anagrama de Paul Verlaine (Francia, 1844-1896)
Para Verlaine la maldición sobre estos poetas se debía a su propia individualidad, es decir, gracias al genio de cada uno ellos y a su hermetismo para con la sociedad fueron seres incomprendidos. Sufrieron de tendencias auto destructivas que terminaron por llevarlos a vidas trágicas.
Posteriormente, el término del malditismo se usó para referirise a poetas, o cualquier tipo de artista, incomprendidos por sus contemporáneos y que no cocecharon éxitos en vida.
Este tipo de artistas rechazan los convencionalismos y desarrollan un arte provocativo.
Además de Verlaine y su grupo, otros escritores han recibido el calificativo de malditos:
Edgar Allan Poe, Charles Baudelaire, John Keats, Guy de Maupassant, Petrus Borel, Germain Nouveau, Thomas Chatterton, Conde de Lautréamont, etc.
Descargar: Los poetas malditos, Paul Verlaine